Según el principio de la unidad del Todo, estamos unidos por una interconexión cósmica. Este vínculo, que trasciende el tiempo y la distancia, es la vibración del amor conocida como "energía universal".

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La terapia energética Reiki tiene en cuenta al individuo en su totalidad y pretende liberarle de los bloqueos que puedan obstaculizar su bienestar. La práctica se basa en la rearmonización de los chakras, los puntos donde convergen los canales de energía que recorren el eje central del cuerpo.

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Mi papel es actuar como canal de esta energía curativa, captando los flujos del universo y transmitiéndolos a la persona que recibe el tratamiento.

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Desde un punto de vista práctico, para maximizar los beneficios de esta terapia a distancia, podemos acordar un momento de relajación juntos. También se puede crear un ambiente propicio para recibir la energía Reiki utilizando música suave, incienso y una vela.

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Este tratamiento tiene un profundo efecto liberador de tensiones, por lo que es aconsejable beber mucha agua después de una sesión.

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